En Qué Pierdo el Tiempo (III)

Hay una ley que no falla. Si algo es susceptible de complicarse, lo hará. Se avecina el estreno del documental sobre la Banda Trapera, finalmente a concurso en la sección nacional de In-Edit. Aunque satisfechos en la medida de lo posible del producto final, hay cierta sensación de asqueo en el equipo. Qué les voy a contar. En fin, penalidades varias por las que hemos atravesado y la certidumbre de que este tipo de cosas, que sólo son posibles bajo la bandera del idealismo, no sirven para nada. Las condiciones de post-producción y montaje no han podido ser más gitanas.

De la Ceca a la Meca con el dichoso Mac. Hoy en tu queo mañana en un rincón que nos cede no se quien. Sin un duro. Pura guerrilla. Razonable, la depresión post-parto. No podía pues escoger peor momento Morfi para apretarle el gatillo a ese ego que se le dispara periódicamente. Quiere el hombre capitalizar como sea el documental, ahora que prepara un regreso en solitario. Normal. Pero sus acercamientos al poder, aunque sea el decadente poder de sus viejos compinches socialistas, podrían comprometer las intenciones de los responsables del documental, en absoluto dispuestos a que éste se politice o desvíe de la realidad trapera. Y a eso le andamos dando vueltas estos días Dani Arasanz y yo, ambos con tiempo libre de sobras, a golpe de móvil. Morfi, que es un gran cómico, nos ha sugerido, como hace siempre, dejándola caer como si nada, que contratemos un experto en protocolo. Quiere traerse a Montilla y no sé qué otros parásitos al estreno, todo sea por los viejos tiempos del PSUC, allá en el casal del pueblo, a ver si vareándole otro poquito el olivo suelta unas últimas aceitunas. Aunque no servirá de gran cosa, tendremos que sentarnos a hablar con él. Lo preceptivo sería hacerlo con Miguel Angel, pero ahora se encuentra en una de esas fases en las que sólo hay sitio para Morfi, y a Morfi cuando se le va la chola no hay quien lo pare. Ríanse, pero contra todo pronóstico es hasta capaz de persuadir al de Inájar. Confiemos en que todo quede en un amago de pesadilla, otra más de las varias que sin duda todavía nos depararán los reactivados delirios de grandeza del amigo, y el impresentable no esté finalmente presente.

Mientras tanto, la segunda edición de Escupidos De La Boca De Dios permanece en el limbo editorial. Los nuevos capítulos, ya lo dije, fueron escritos y entregados a Munster hace tiempo, pero allí están de reajustes, afinando números para amortiguar esa crisis que nos hemos inventado entre todos, según dice el jefe de Montilla. En la misma inopia, aunque por otros motivos, se encuentra también la segunda edición de Combustión Espontánea. Problemas de imprenta han retrasado la publicación de  la colección 33 1/3, y el efecto carambola ha repercutido sobre todos los demás lanzamientos de Discos Crudos, incluida la reedición del primer LP de Cancer Moon. Si a eso le sumamos que el señor Crudo se toma las cosas con esa parsimonia de osezno retozón que le caracteriza, permítanme que me retire del campo de las predicciones. No obstante, sepan los que inquieren al respecto que el segundo volumen de Poder Freak avanza a buen ritmo, más o menos según lo previsto.

8 comentarios en “En Qué Pierdo el Tiempo (III)

  1. Albert Benach

    Pues Jaime, aunque no conozco al interfecto, me alegra pensar que vuelva en solitario. No es para sacar la lagrimilla de la nostalgia, no, por dios, a estas alturas y a mi edad (y soportando cada vez menos la audición de discos rock), pero el primer elepé que me compré con mi dinero -corría el….¿84? y yo debería tener 13 años- era, fue «Aliento de Noches» un soberbio mini-elepé de Morfi con alguien -no me hagas ir al comedor a mirarlo por favor, pero no sé su nombre- apellidado Juliá en la guitarra…¿Es el hermano de tu compañero de guerrillas? Me catapultó: un disco directo, tremendamente urbano, anti-pasma, drogas por en medio y riffs tremendos…Suerte que (y aunque alentado por Morfi y toda la tribu del rock radikal vasco de entonces) no llegué nunca a probar el jaco….Abrazos Jaime…Enhorabuena por la página que -y así me sincero- cada vez estoy más lejos del RUTA, pero ten en mi, y en tu teje-maneje cyberespacial, un seguro seguidor…Abrazos colega!!!!!

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  2. Irazzi

    Fue contigo con quien hable de que soy familiar de uno de los que fundó la banda trapera del rio (Peter) y que dijiste que a finales de verano querías quedar? Dime algo vía e-mail si puede ser.

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  3. Lucas Kornellá

    Tengo la suerte de conocer a Jaime Gonzalo hace algunos años, particularmente siempre me parecio un tio sin pelos en la lengua, politicamente incorrecto, de los que no se bajan los pantalones, sin duda alguna, una de las plumas más coherentes y acertadas, del escaso, panorama critico-musical español.
    Conociendolo como lo conozco, sé que le habra costado escribir este post, sin duda sus pelotas han de estar infladas como un balón de Nivea para verter estos acertados comentarios.
    También puedo decir que he compartido con Dani Arasanz alguna que otra cerveza en mi pueblo mientras comentamos los entresijos de el documental y sus personajes, pues, siendo el director del mismo, no conocio en su dia la realidad de el grupo al que a retratado en su trabajo junto a sus colaboradores.
    Dani es una persona sencilla, joven e ilusionado con su «curro» en el documental, no se le puede pedir más.
    Lo que cuenta Jaime aqui es una gran verdad y se resume facilmente en las palabras de Morfi en una entrevista radiofonica que he tenido el honor de ceder para este documental, en la misma,Morfi, Miguel, para los amigos, argumenta que para hacer rock no se necesita ayuntamiento. Parece ser que ahora, para hacer rock si se necesita ayutamiento. A buenas horas mangas verdes…
    Tengo que recordar,en justicia, que en este documental no se haga referencia alguna a Ignacio Juliá, fan y precursor de la presencia en los medios de comunicación de la Banda Trapera, sin duda, sin el el grupo no habria tenido la repercusión que tuvo en su dia en los escasos medios de comunicación que se hicieron eco del grupo.
    Jaime, tú me conoces y sabes que comparto tu punto de vista hasta el infinito y más allá, la Banda debe estar donde debe y para eso no necesitamos ayuntamiento. Hace tiempo dejé de hacerle la faena a nadie, lo dice un refrán claramente, » El que quier peces, que se moje el culo», u otro igual de valido, » El que siembra, recoge».
    A buen entendedor….
    No puedo despedirme sin dedicar a Jaime un «olé tus güevos» por poner los puntos sobre la ies.

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  4. El Subidas...como JuanDioso me nombró una vez

    Buenas amigos, si, soy yo, el que durante 30 años ha cabalgado con esos truhanes haciendo lo que mejor sabe hacer…tocar el bajo en la Banda Trapera del Rio.

    Los que conoceis a la Trapera ya sabeis quien la ha destruido siempre. El mismo que ahora le lame el culo a los payasos políticos de turno para su beneficio particular.

    Aún dejando como axioma que la carne es débil, el recuerdo es fuerte e imperecedero.

    Dios !!! como echo ha faltar a mis grandes amigos JuanDioso y Modesto.

    Prefiero que el cáliz de la Trapera quede bien custodiado por tipos como Lukas Kornellá, El Perez, Ignacio Juliá o Jaime Gonzalo, todos ellos de la vieja guardia y pido a Entes superiores que ningún lameculos difame JAMÁS ese bonito recuerdo, que ha ocupado mi ilusión y mis vivencias tantos años.

    Que viva la Trapera por que The Rolling Stones o Miles Davis tampoco morirán nunca.

    «No te entiendo»

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  5. Fredi

    Hola, Jaime. Antes de nada, felicidades por el docu. Está muy bien, en la linea del libro. No sé si este post es el lugar adecuado, pero quería comentarte una cuestión: leí con gran deleite tu artículo de hace unos meses en el Ruta sobre el Rock progresivo barcelonés. Tal como decías en el mismo, es una época la de Máquina!, Ia & Batiste, Tapimán, Sisa y algunos más muy interesante y llena de buenos discos, pero que a pesar de ello es ninguneada de forma sistemática por instituciones ¿culturales? y medios supuestamente especializados. Viene todo esto a cuento porque el miércoles acudí al cine Aribau para ver «Barcelona era una fiesta», el documental sobre el underground barcelonés de los años 70. Y cuan grande fue mi decepción al constatar -una vez más- que ese periodo al que me refería más arriba… no existió. Sale Pau Riba, Oriol Tramvia y para de contar. Ni rastro de los Ia Clua, Batiste, Herrera, Tapi… De hecho, no sé que pintaba ese documental -que, la verdad, parece un documental sobre cómic underground- en un festival como el In-edit, pero… En fin, creo que hay material de sobra para escribir un buen libro sobre la materia -ni que decir tiene, Jaime, que serías la persona ideal para escribirlo- e incluso hacer un documental ad hoc.

    En fin, Jaime, esto es todo.

    Recibe un saludo de un lector fiel.

    FRedi.

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